Si de algo estoy
totalmente de acuerdo, mucha, es que toda esa alharaca pisada o circo que se
arma en las redes sociales cuando pasa algo supuestamente relevante, casi
siempre, y lastimosamente, se queda en eso: en un show, porque ya sabemos como
somos los mulamaltecos, ¿vaa? Nos encanta opinar por opinar casi siempre porque
es bonito seguir la corriente, porque quedamos callados y no abrir el hocico
para decir lo que putas sea es condenarnos al aislamiento y a la bajeza
intelectual, es desperdiciar una gran oportunidad para sentirnos “parte de”,
para sentirnos (¡Ay, qué chulo se oye!) integrados. Nos gusta llamar la
atención, simón, que se sepa lo que pensamos (ojalá NO fuera lo mismo que ya
dijeron otro montonajazal de cerotes), porque para eso son las putas redes
sociales, para aprovechar a sacar a asolear nuestro ego poco consentido y que
todo el mundo se entere de nuestra capacidad para sondear las profundidades y abordar
las magnitudes de los sucesos (muertes violentas, juicios históricos, cagadales
políticos, deportes, libros, etc.). Sí, en el fondo nos gusta creemos
importantes porque sabemos que más de alguno va a leer nuestras muladas y, como
buenos montoneros (sí, porque eso también somos, casi a nivel profesional, como
no, ocupando los primeros puestos del ranking), va a apoyar nuestra lucidez y
va a aplaudir nuestra exquisita sabiduría. ¡Ah, qué seríamos sin esos
guacalazos de vítores, hurras y beneplácito diarios! ¡Oh, en qué sombra
acurrucarnos para sollozar la tardía dosis de aprobación cuando ya es la hora
del almuerzo y ningún cerote nos ha dicho que como nosotros no hay dos en este
mundo desagradecido! Hasta ahí, el pan de cada día. Nada de que asombrarse y
nada nuevo que agregar porque es cierto. Así es la mierda. Punto. Que estas
manías pisadas sean algo que haya que criticar y reprobar, lo entiendo,
precisamente por lo dicho arriba: huele a circo, a moda pasajera, a bla-bla-bla
y no nos conduce a nada constructivo. Pero que de primas a primeras salgan los
Nuevos Pensadores 2.0, Poseedores de la Verdad Absoluta y de las Directrices
Supremas del Actuar y del Destino del Ser Humano, con sus vistosas capas de
colores chintos que cruzan el viento contaminado de las calles de la capital,
como patéticos superhéroes, y sus ínfulas narcisistas y dictatoriales (eso
parecen) de Endiosados Jueces Quisquillosos e Inconformes (de los que dan ganes
de decirles: ¡Haber creado vos el mundo, pisado!) a vociferar sandeces y
a reprocharle al VULGO que, cuando pase algo, un asesinato, por ejemplo, y se
vuelva noticia, además de NO incurrir en ninguno de los anteriores ERRORES,
tampoco hay que sucumbir y quedarse con el sentimiento de INDIGNACION, que hay
que ir un poco más allá, buscar causas, analizar motivos, debatir, proponer
soluciones, basarse en datos y estadísticas, corroborar informaciones, escarbar
en los orígenes de la psique y del individuo (el asesino, ojo, no la víctima)
como individuo social, de su “background” (oíte a tu amor, jajaja), de sus
condiciones, para entender el por qué de tal o cual desgracia. Claro, suena
fácil, ¿no?
Bueno, sí, me imagino que
tienen razón, pero entonces, pregunto: si aparece una patojita de diez años
violada y estrangulada en un barranco como si fuera un deshecho cualquiera o
una muñeca sucia e inservible que ninguna niña quiere, ¡qué!, ¿ya no podemos
INDIGNARNOS?, ¿sólo lo podemos hacer íntimamente, en nuestro cuarto, sin que
nadie lo sepa?, ¿tenemos que actuar TODOS como si fuéramos sociólogos,
antropólogos, psicólogos o criminólogos? Porque ojo, queridas lumbreras académicas,
NO TODOS LO SOMOS, yo NO LO SOY, por ejemplo, y no me gustaría, Dios me guarde,
llegar a imaginarme, pensar en cometer ese atropello de aseverar que ESTAN
TRATANDO DE IMPONERME UNA DETERMINADA FORMA DE ACTUAR Y DE PENSAR, dando por
hecho que soy INCAPAZ DE TENER CRITERIO PROPIO y DE CONDUCIRME SEGUN MI PROPIA
VISIÓN DE LA VIDA, ¿o sí? Nah, no me hagan caso, estoy exagerando, como
siempre. No creo que sean tan manipuladores ni pretendan llegar a tanto. El
hecho de que se maleen y muchas veces trate de LINCHAR (Rex, cuidadito, tata,
que esta palabrita como no muy les hace gracia) INTELECTUALMENTE HABLANDO a los
que NO piensan como ellos ni comparten sus ideas, NO QUIERE DECIR NI MIERDA,
¿no? El pedo es sencillo: a mí déjenme reaccionar como quiera, muchá, déjenme
compadecerme por quien yo crea que merece compasión, déjenme sacar mis propias
conclusiones. Yo, y sé que hablo por muchos, no necesito lecciones ni cátedras
con tufillo a imposición, a coacción ni a militancia. En serio. No me metan en
su costalito ni esperen que les lama el culo. Sus puntos de vista son
interesantes y reflejan sus grades capacidades intelectuales, sí, NO LO DUDO NI
LO DISCUTO, me consta y mis respetos, porque además sé que comparándome, quedo
como un perfecto analfabeta. Lo que quieran. Pero insisto, no se olviden de que
UNIFORMAR y PRETENDER que, de la noche a la mañana, todos los mulamaltecos
reaccionemos como ustedes, demostrando grandes dotes de reflexión y asimilación
de la realidad del país, y además seguridad de sobra en sus afirmaciones, es
ridículo. ¿Acaso no es ridículo? Me acuerdo que una vez un cuate, echando
tragos, se maleó cuando me puse a comentar, como la gran puta, la masacre de
una familia entera en no se dónde putas. Y me acuerdo que le decía: Puta
mano, hasta ganas de chillar me dieron de ver los cuerpecitos de los güiros en
esa noticia mierda, fijate; y el cuate: Comé mierda, Rex, ¿y qué putas ganas
con chillar? Y a mí me salió decirle: ¿Y qué es lo que hay que ganar,
pues? Y el pisado no supo qué contestar. Se quedo callado, aprovechando
para empinarse medio vaso de chela. Al ratito, me dijo: Ah, no sé, pero es
mejor analizar las ondas. A ver, Filósofos de Pacotilla y Faltos de Cariño,
yo ye estoy a verga de tanta paja retórica, fíjense y, como no veo que la cosa
vaya a cambiar, porque el Gobierno no hace ni mierda, la policía tampoco (al
contrario, ayudan), creo que al menos tengo el derecho de ya no querer razonar
NI MIERDA. A mí, cuando me entero de las mierdas que pasan en Mulamala, mierdas
que te confirman que la vida no vale ni verga, me sobrepasa, se me hace un nudo
cerote en la garganta, muchá, y ME SACO DE ONDA, pues, porque antes que
cualquier mierda que pueda ser (sociólogo no, evidentemente) soy HUMANO, y es
un DERECHO INHERENTE que, ante un hecho nefasto de ese tipo, o cualquiera que
se le parezca, reaccione como SE ME PEGUE LA REGALADA GANA, me encabrone,
insulte, maltrate, grite, llore, me encolerice, rabee, me consterne, en fin, ME
INDIGNE, sobre todo cuando las desgracias incluyen niños. No sé, trato de
serenarme, pero no puedo. Sus conjeturas y sus debates, oh, Arcanos del
Raciocino Exclusivo, bien gracias, pero llega un momento en que, para mí, se
convierten en pura cháchara, en puro berrinche, a veces, muy cercano al WHORE
ATTENTION.
Porque por si fuera poco,
también resulta que SI SE NOS PERMITE INDIGNARNOS, si ELLOS se apiadan y nos
regalan esa bonita posibilidad, tiene que ser parejo. Sí, nuestros Próceres del
Pensamiento Crítico, Colectivo y Consecuente de Guatemala DICTAN unanimidad y
achacan los valores morales y éticos de quienes, ante la circunstancia de que,
por ejemplo, un caco sea vapuleado luego de haberle disparado en la ñola a un
chavo al que le robó el celular, y los dos se vayan a caldo, sólo PEGUEN EL
GRITO EN EL CIELO por le víctima. Y no, señores, no, cómo va a ser eso. Hay que
sentir IGUAL lástima por LOS DOS: víctima y victimario. Así de claro. Si no, ¡NO
VALE! Y aquí yo ya me pierdo, muchá, porque no sólo nos EXIGEN reaccionar con
la razón sino que además, nos piden actuar corno si fuéramos MODELOS
HUMANITARIOS y/o BEATOS. Y yo, al menos, NO SOY ni una cosa ni la otra. Yo soy
un puto manojo de impulsos caóticos de naturaleza flemática y pesimista, ¡no
jodan! Y por lo mismo, no crean que no me dio lástima el pobre compadre vapuleado,
porque se equivocan, pero dejen que YO decida por mí, dejen que me salga sentir
lástima o no. ¡No me digan lo que tengo que sentir! Todos hablando del chavo
del celular, ¿y la familia del caco qué?, suelen ser los comentarios que emiten
constantemente nuestros Semidioses Olímpicos. Y si, yo entiendo que, SEGUN LOS
ESTUDIOS, el 80% de los cacos, extorsionadores, mareros, violadores, pederastas,
sicarios y criminales tuvieron una infancia difícil, crecieron en ambientes
violentos y precarios, sufrieron abusos, no tuvieron la oportunidad de
escolarizarse, etc , si, es una mierda y qué mal porque es el resultado de un
maldito círculo vicioso, pero, ¿hasta cuándo tenemos que seguir
compadeciéndonos de los trágicos pasados (y presentes) de nuestros delincuentes
y asesinos? Y lo repito: ¡no justifico ni apoyo los linchamientos ni la
justicia en manos de la masa! ¡Para nada! Sólo comento que, ante la dureza con
la que esta gente actúa casi siempre, a mí no me nace desearle un final feliz,
¿me explico? El bote, al menos, que sería lo más adecuado. Porque yo me pregunto
¿estos cuates son TODOS realmente bestias salvajes sin una pizca de cerebro
para, pese a su pasado y sus condiciones de vida, NO saber lo que está bien y
lo que está mal. Acordate que son OTRAS escalas de valores, Rex, supongo
que me estarán diciendo. Sí, pero aún así me cuesta creer que no sepan a qué
atenerse, porque creo que nadie que haya crecido “sobreviviendo”y “malviviendo”
en un ambiente marginal, como el de muchas colonias o zonas de la capital,
ignore cómo es la mierda, muchá. Al contrario, lo sabe perfectamente desde
güiro. No creo que ninguno de ellos ignore que así como mata también se lo
pueden tronar a él. Y por si se le olvida, tampoco dudo que alguno de sus
familiares se lo recuerde: Cuidate, Nery, no te dediqués a esas babosadas,
mirá que te puede pasar algo, hombre. Para muchos delincuentes (esto me lo
han comentado amigos que han trabajado en proyecto de reinserción social, etc.)
la capital es una selva; muchos se encomiendan (si, rezan y toda la casaca) antes
de salir a delinquir porque SABEN que es probable que les pueda pasar cualquier
desgracia. Lo saben. Empezaron por necesidad y lo convirtieron en modus
vivendi. Y están conscientes de que en la calle hay algo valioso en juego. Otra
cosa es que no lo valoren como el resto, que es diferente, pero eso es parte de
su visión: no tengo opciones más que ésta, que también es discutible. Me
acuerdo de un documental que vi una vez sobre los reclutamientos de una banda
de sicarios de México. Tres sholones tanteando a posibles nuevos miembros (gente
venida del campo, muchos de ellos analfabetas, con caras de pocos amigos) y
preguntándoles: —¿Tienes miedo, güey? —No, señor. —¿Sabes que te pueden
mandar a a la chingada, cabrón? —Sí, señor. A eso me refiero. Todos, de
alguna u otra manera, por muy IGNOTOS o imbéciles que seamos, sabemos a que nos
metemos, o al menos tenemos una idea. Por eso mismo, lo que más me cuesta
creer, a mí, personalmente, es que debamos ENTENDERLOS y hasta COMPADECERLOS cuando
la desgracia LES PASA a ellos. No digo que no sea posible; sólo digo que me
cuesta ponerme en ese plano marca Gandhi. Porque también entonces, ¿cómo se explica que haya gente criada ambientes igual
de hostiles que NO ha ELEGIDO y optado por la delincuencia? Conozco muchos
casos. Es más, conozco casos de gente que ha crecido rodeada de comodines, en
familias “bien”, con estudios universitarios y demás, y han ELEGIDO también ser
delincuentes. ¿Eso qué? ¿También nos tenemos que evocar a otros estudios, no? Me-lo-i-ma-gi-no.
El tema es largo y
pantanoso, muchá, y yo no soy experto en ni verga de lo que estoy escribiendo.
No justifico ni justificará nunca la violencia de ningún tipo, eso sí, que
quede bien claro. Hablo aquí como un simple ser humano, como un ciudadano despojado
de academicismos, teorías y estadísticas, sin obligar (sutilmente) a nadie para
que lea esto, como en los muros de FB. Hablo de cosas complicadas que a lo
mejor no lo son tanto porque al final de cuentas se reducen, aunque suene frío
y arbitrarios, a elecciones, a lo que, voluntariamente o no, uno elige y acaba aceptando.
Yo podría decirle a un caco: mano, robá, pero no matés, pero él elige
lo que quiere. Es así. La suerte de los delincuentes está echada, amigos. No se
hace falta que yo lo diga. Lo que pasa es que imagino que muchos de ellos,
gracias a las drogas y a ese coraje interno, producto de sus vicisitudes y de
su instinto de supervivencia, que los hace sentirse poderosos por el simple hecho
de andar armados y regir sobre la vida de cualquier ciudadano común y
corriente, evita que tengan presente que la muerte también los anda buscando a
ellos. Así que por favor, cuando uno de ellos se vaya con Pancho (me pela la
verga cómo), y sea noticia, no me pidan que me indigne por su muerte ni
cuestiones el hecho de no enviar condolencias a sus familiares (¡habrase
visto!), permítanme ELEGIR a mí cómo reaccionar y contarlo, si se me ronca el
culo. Ustedes, Amantes del Saber del Saber Universal y del Devenir de la Humanidad,
sigan marcando diferencias (entre LOS ILUMINADOS y el resto de la plebe) con
sus especulaciones de eruditos y sus sentencias sobre lo correcto y la inaceptable,
y sólo deseo que jamás nadie de su familia y amigos cercanos se vean implicados
en ningún “hecho de sangre”, como dirían en Sonora, y que si esto ocurre (toco
madera pese que no, y lo digo de todo corazón, créanme), sean lo
suficientemente coherentes con todo lo que hoy predican, se jactan y ufanan. Si
lo hicieren (estoy usando el futuro de modo subjuntivo, para que no
quede duda de mi intención al expresarme), avísenme porfa, sí, para felicitarlos
públicamente y admirarlos perpetuamente, porque se lo merecerían, fijo.
Con el amor que sólo una
madre puede brindar,
Rex Mamey