11 sept 2006

NARRATIVA MULAMALTECA (SEGUNDA ENTREGA)


Muchá, en la versión original de este cuentín, escrito por su “servilleta” una apestosa mañana de sectiembre del 2002, el título era el de Quien no defeca, muere, pero en la versión que leerán a continuación, una versión a la altura de todos ustedes, con concepto, masterizada, digitalizada, neuropsicotizada y narcotizada, el título es otro y hay algunos cambios, pero a ustedes que les pele, de todos modos, no conocen la versión original, así que mejor hago shó, ¿no? Bueno, no está demás informar que en este ocasión tengo a bien dedicar este mi post al señor presidente de los Yunaited Esteits, Jorge Arbusto (ver foto arriba), recordándole que lo del 11-9 fue, es y será SU PUTA CULPA.

QUIEN NO CAGA, ESTALLA

Al menos eso dice esa partida de zanganotes, la juventú de ahora. Para ellos es más fácil refugiarse en la escatología para evitar la detención de la existencia. Caguemos hoy que mañana moriremos. Hay que cagar todo el puto tiempo para prolongar por dos o tres minutos lo que en menos de uno, se nos puede evaporar. Suena fácil, pero no lo es. Ellos lo dicen porque siempre tienen que comer, es más, se hartan. Y no les cuesta absolutamente nada. Es cuestión de maña y picardía, por eso es que... La frasecita ésa la había leído Cirilo Arce en unos sanitarios de no sé cuál café aquella mañana de sorpresas e imprevistos, cuando le dieron el día libre en su trabajo y por qué no, irse al café para gozar del descansito, ¿qué más podía pedir? No, si con eso ya tenía para contentarme, le decía a Rogelio Pelayo una semana después, en el funeral de Asunción Granados, la ex esposa de un colega suyo. Además, ese mismo día me enteré de que mi billetera había aparecido y mi dinero también, la había botado debajo de la cama, ¿puede creerlo usted?

Pero vea usté cómo son de atrevidos, ésa no era la única frase que había; las cuatro paredes están cundidas de ellas, pero ésa fue la que más me llamó la atención. Antes había leído una que decía algo de una tal Regina que un tal Lucas la estaba perdiendo y que la disculpara por andar con su hermana, que ésta sí era puta y que él lo hacía sólo porque era islamita y que así sí era permitido... pero me pareció cursi y demasiada tendenciosa; además, dígame usted, ¿cuándo iba Regina a enterarse de esa disculpa, si estamos hablando del baño de hombres?

Cirilo Arce continuó deduciendo e infiriendo hasta donde le daba la cabeza, espulgando la frase como si ésta fuera un perro con exceso de pelaje. Pobre Rogelio Pelayo, ¿qué era lo que había hecho para merecer ese huracán de dialécticas y lamentaciones? ¡Maldito el día en el que había traspasado, sin recordarlo bien ahora, el límite de los límites! Jamás te hagás amigo de un compañero de trabajo, recordaba a su tata. Pero la comunicación entre colegas es importantísima, por eso seguía ahí, entre soportando y tratando de ser cortés y amable, siguiendo la corriente más que todo. Usté me entiende, ¿verdá Rogelio? ¿A que no? Esos malcabrestos afirman que cagar es lo mejor del mundo, es el placer de los placeres, pero en el fondo sólo lo hacen porque están aterrados a causa del factor muerte, que es incomprensible, y no porque disfruten estar dejando mierda por cualquier lugar a donde vayan. Les duele que la comida que tanto saboriaron se convierta en eso, en eso amorfo y mal oliente. Bueno, amorfo a veces, pero mal oliente, siempre. ¿Y por qué le comento esto? Antes de que me lo pregunte, yo se lo contesto. Pues porque hay algunos de ellos que han llegado al extremo de comer no tres veces al día, sino hasta cinco o seis, con el propósito de alcanzar una especie de eternidad sostenida por el sano placer de la defecación, cosa que a mí no muy me...

Rogelio Pelayo no hallaba dónde meter la cara de la vergüenza a causa de tanta estupidez contenida en un solo hombre, y no sólo por eso, se encontraban en el funeral del compadre Gutiérrez y había personas cerca, algunos niños podían aguzar el oído y si se llegaban a enterar los parientes, él iba a quedar como un mequetrefe, morbosa cochinilla, incómodo de ver a cierta distancia, en fin, como una mierda. Y no, él no era así, la culpa la tenía el arrevesado de Cirilo Arce, a éste era a quien tenían que sacar de allí y darle un escarmiento de los buenos, y no a él, que de haber sabido lo que iba a suceder, mejor ni se hubiera asomado, y la culpa también la tenía su esposa por enfermarse a cada rato y por impedirle que enviara unas flores y una tarjeta de condolencia en vez de hacer acto de presencia a la casa de los Gutiérrez, y que después hablara con Alonso y le aclarara cómo habían estado las cosas.

El curso del funeral no se detenía, las personas iban y venían, algunas tristes, otras serias, otras como si nada, y Rogelio no podía creer que su compañero estuviera hablando de materias excrementicias precisamente esa noche, y precisamente allí, donde de no ser por el ruido de las sillas en constante movimiento, por algunos tosidos y por el curioso lloriqueo de la hija mayor de Asunción Granados, el silencio hubiera reinado como si se tratara del mismo campo santo. ¿Qué diablos tenía que ver “cagar” con “morir” o viceversa? Simplemente se trataba de una frase lógica plasmada en la pared del baño de un café por cualquier individuo el cual, o lo estaba matando la necesidad de vaciar sus tripas desde hacía un buen tiempo, posiblemente después de un largo viaje en autobús o después de un concierto de casi tres horas; o lo estaba matando la idea de su gordura, puesto que de no defecar nunca, su volumen aumentaría exageradamente y después de ser el cague de risa de sus amigos, se asfixiaría en su propia pestilencia debido a que la mierda habría encontrado otras vías de salida: nariz y boca, por ejemplo. Rogelio estaba razonando demasiado, más que de costumbre.

Hay otros canallas que le rinden culto a la defecación; así como se oye, mire cómo es eso... Se comen su propia porquería o la porquería de otros mientras se sobijean o mientras chiman, y viven de eso creyendo que mientras más coman —literalmente, claro—, más van a permanecer aquí, en la Tierra. ¿Pero qué pasaría si no cagaran? Los desgraciados se morirían de hambre, así como lo oye... Rogelio ya no podía más, estaba convencido de que Cirilo andaba desquiciado con tanta habladuría. Lo peor de todo es que de tanto escucharlo, su mente se estaba debilitando y estaba cediendo terreno; y temía caer en el juego, rebajarse y ponerse a discutir con Cirilo hasta que ninguno de los dos saliera de allí contento, con deseos de aniquilar todo indicio de razón y de cordura. Entonces se atrevió a preguntarle al versátil colega si sabía de qué era lo que había muerto Asunción Granados, que en paz descansaba, y que a lo mejor había muerto por no haber cagado lo suficiente la última vez que había ido al baño. Cirilo Arce cambió de color a causa de la blasfemia que su colega acababa de "proferir" y se alejó de inmediato de su vista, dejándolo con la palabra en la boca, solitario y tranquilo, para que le pidiera perdón a Dios por tanto descaro. Rogelio, con cara de mula por no entender la reacción de Cirilo, optó por sentarse y después salir a caminar, y luego fumar dos o tres chancuaquitos, y luego vaciar el estómago antes de dormir, los frijolitos con crema, y no saber si ésa sería la última vez, pero sí, por si las moscas.

11 comentarios:

  1. Cuanta importancia de la mierda, verdad?

    Todo relacionado con nada, y nada relacionado con todo.

    Muy buen relato Senior del Muladar.

    Orale.

    ResponderBorrar
  2. jajajajajajaja la mierda.....
    Mano es que es cierto mira John Wayne (Yon Guein pues) se murio por no cagar...en serio...
    Vos pero la foto esa ¿es de Arbusto o es pura coincidencia?

    jajajajaja que buenisimo relato.

    un saludo,

    ResponderBorrar
  3. magicodefecantetragicomedia

    ResponderBorrar
  4. debo decir que la foto es impactante, una forma casi perfecta, la iluminación exacta...

    no jodas vos por poco vomitoooo!

    bueno no podias dejar este tema fuera verdad? es parte de nuestro diario vivir!

    saluditos pue!

    ResponderBorrar
  5. Cuando la mierda valga dinero, los pobres naceremos sin culo!!!!!

    ResponderBorrar
  6. Antes de dejar mi comentario voy a ir a cagar no vaya a ser...

    Ahhhh, ahora si.

    Definitivamente una muy buena narrativa, me gustó mucho la forma en la que escribís, tanto este como los otros textos de tu blog, simplemente es buenísimo.

    Me gustó lo de: ...a causa de tanta estupidez contenida en un solo hombre... yo conozco a un par a los que les viene como anillo al dedo, (o será con el dedo en el anillo).

    Deberías pensar en publicar tus textos en formato impreso, en un libro pues, que podamos tocar, ver y oler.

    @Andy: muy bueno el comentario.

    ResponderBorrar
  7. guacala! uf! que asco esa tu foto perfecta agggg! no cabe duda que tu inteligencia es grande y tu versatilidad no tiene igual, enviale a doña Estela, tu gran cuata, una foto igual, Tenés razón, la mierda es parte de la vida, hay quienes comen, duermen y cagan y es todo lo que hacen en su triste vida otras personas, solo medio comen, medio duermen, medio trabajan y no cagan: enfermos del colón jajaja, vero

    ResponderBorrar
  8. PERRO: Simón, la mierda es importante y parte de nosotros, aunque a algunos se les va la mano. ¡Buen onda pues!

    ZOPILOTE: La foto es la imagen mental que tengo cuando veo la cara de ese hijo de puta de Yorch Pusa Peluda o Arbusto, da igual, fijate... Buen dato el de Guein, mano, jejeje

    ANÓNIMO: Cabal, mai friend

    LU!: Yo vomité también, vos... jejeje. Es verdad, la foto está talishte... MEA CULPA!!

    ANDY: A la última persona que oí decir esa frase fue a mi abuelita, creo... puta, qué buen recuerdo, fijate (murió hace unos meses) Buena onda, vos

    PEPE: ¿Pero te limpiaste bien, vos? ¿o a la carrera?, jajaja... Gracias por las flores, mano... Un gusto que te gusten estos rollos... Lo del libro está todavía en veremos, pero es algo que tarde o temprano aparecerá en las librerías como una especie de lunar maligno en la Literatura Mulamalteca, jajaja

    VERO: Lo de la inteligencia y versatilidad me viene de familia, HE DICHO. ¡Jajajaja! La pobre Estela debe estar arrepentida y seguramente fotos de estas ha de tener, seguro que cuando solicitó su grin car en los USA, le pidieron algunas, jeje

    ResponderBorrar
  9. CHEYO: Si usté lo dice, le creo.

    Paz

    ResponderBorrar
  10. buena buena, yo me cague pero de la risa, y de seguro con vos no creo que sea la ultima vez ke me cague jajajaajja buen comentario el de andy y el del anonimo jajajajaa orales

    ResponderBorrar