25 jul 2013

CÁLLESE Y DÉJEME A MÍ CON MI AJETREO INTERNO



Si de algo estoy totalmente de acuerdo, mucha, es que toda esa alharaca pisada o circo que se arma en las redes sociales cuando pasa algo supuestamente relevante, casi siempre, y lastimosamente, se queda en eso: en un show, porque ya sabemos como somos los mulamaltecos, ¿vaa? Nos encanta opinar por opinar casi siempre porque es bonito seguir la corriente, porque quedamos callados y no abrir el hocico para decir lo que putas sea es condenarnos al aislamiento y a la bajeza intelectual, es desperdiciar una gran oportunidad para sentirnos “parte de”, para sentirnos (¡Ay, qué chulo se oye!) integrados. Nos gusta llamar la atención, simón, que se sepa lo que pensamos (ojalá NO fuera lo mismo que ya dijeron otro montonajazal de cerotes), porque para eso son las putas redes sociales, para aprovechar a sacar a asolear nuestro ego poco consentido y que todo el mundo se entere de nuestra capacidad para sondear las profundidades y abordar las magnitudes de los sucesos (muertes violentas, juicios históricos, cagadales políticos, deportes, libros, etc.). Sí, en el fondo nos gusta creemos importantes porque sabemos que más de alguno va a leer nuestras muladas y, como buenos montoneros (sí, porque eso también somos, casi a nivel profesional, como no, ocupando los primeros puestos del ranking), va a apoyar nuestra lucidez y va a aplaudir nuestra exquisita sabiduría. ¡Ah, qué seríamos sin esos guacalazos de vítores, hurras y beneplácito diarios! ¡Oh, en qué sombra acurrucarnos para sollozar la tardía dosis de aprobación cuando ya es la hora del almuerzo y ningún cerote nos ha dicho que como nosotros no hay dos en este mundo desagradecido! Hasta ahí, el pan de cada día. Nada de que asombrarse y nada nuevo que agregar porque es cierto. Así es la mierda. Punto. Que estas manías pisadas sean algo que haya que criticar y reprobar, lo entiendo, precisamente por lo dicho arriba: huele a circo, a moda pasajera, a bla-bla-bla y no nos conduce a nada constructivo. Pero que de primas a primeras salgan los Nuevos Pensadores 2.0, Poseedores de la Verdad Absoluta y de las Directrices Supremas del Actuar y del Destino del Ser Humano, con sus vistosas capas de colores chintos que cruzan el viento contaminado de las calles de la capital, como patéticos superhéroes, y sus ínfulas narcisistas y dictatoriales (eso parecen) de Endiosados Jueces Quisquillosos e Inconformes (de los que dan ganes de decirles: ¡Haber creado vos el mundo, pisado!) a vociferar sandeces y a reprocharle al VULGO que, cuando pase algo, un asesinato, por ejemplo, y se vuelva noticia, además de NO incurrir en ninguno de los anteriores ERRORES, tampoco hay que sucumbir y quedarse con el sentimiento de INDIGNACION, que hay que ir un poco más allá, buscar causas, analizar motivos, debatir, proponer soluciones, basarse en datos y estadísticas, corroborar informaciones, escarbar en los orígenes de la psique y del individuo (el asesino, ojo, no la víctima) como individuo social, de su “background” (oíte a tu amor, jajaja), de sus condiciones, para entender el por qué de tal o cual desgracia. Claro, suena fácil, ¿no?

Bueno, sí, me imagino que tienen razón, pero entonces, pregunto: si aparece una patojita de diez años violada y estrangulada en un barranco como si fuera un deshecho cualquiera o una muñeca sucia e inservible que ninguna niña quiere, ¡qué!, ¿ya no podemos INDIGNARNOS?, ¿sólo lo podemos hacer íntimamente, en nuestro cuarto, sin que nadie lo sepa?, ¿tenemos que actuar TODOS como si fuéramos sociólogos, antropólogos, psicólogos o criminólogos? Porque ojo, queridas lumbreras académicas, NO TODOS LO SOMOS, yo NO LO SOY, por ejemplo, y no me gustaría, Dios me guarde, llegar a imaginarme, pensar en cometer ese atropello de aseverar que ESTAN TRATANDO DE IMPONERME UNA DETERMINADA FORMA DE ACTUAR Y DE PENSAR, dando por hecho que soy INCAPAZ DE TENER CRITERIO PROPIO y DE CONDUCIRME SEGUN MI PROPIA VISIÓN DE LA VIDA, ¿o sí? Nah, no me hagan caso, estoy exagerando, como siempre. No creo que sean tan manipuladores ni pretendan llegar a tanto. El hecho de que se maleen y muchas veces trate de LINCHAR (Rex, cuidadito, tata, que esta palabrita como no muy les hace gracia) INTELECTUALMENTE HABLANDO a los que NO piensan como ellos ni comparten sus ideas, NO QUIERE DECIR NI MIERDA, ¿no? El pedo es sencillo: a mí déjenme reaccionar como quiera, muchá, déjenme compadecerme por quien yo crea que merece compasión, déjenme sacar mis propias conclusiones. Yo, y sé que hablo por muchos, no necesito lecciones ni cátedras con tufillo a imposición, a coacción ni a militancia. En serio. No me metan en su costalito ni esperen que les lama el culo. Sus puntos de vista son interesantes y reflejan sus grades capacidades intelectuales, sí, NO LO DUDO NI LO DISCUTO, me consta y mis respetos, porque además sé que comparándome, quedo como un perfecto analfabeta. Lo que quieran. Pero insisto, no se olviden de que UNIFORMAR y PRETENDER que, de la noche a la mañana, todos los mulamaltecos reaccionemos como ustedes, demostrando grandes dotes de reflexión y asimilación de la realidad del país, y además seguridad de sobra en sus afirmaciones, es ridículo. ¿Acaso no es ridículo? Me acuerdo que una vez un cuate, echando tragos, se maleó cuando me puse a comentar, como la gran puta, la masacre de una familia entera en no se dónde putas. Y me acuerdo que le decía: Puta mano, hasta ganas de chillar me dieron de ver los cuerpecitos de los güiros en esa noticia mierda, fijate; y el cuate: Comé mierda, Rex, ¿y qué putas ganas con chillar? Y a mí me salió decirle: ¿Y qué es lo que hay que ganar, pues? Y el pisado no supo qué contestar. Se quedo callado, aprovechando para empinarse medio vaso de chela. Al ratito, me dijo: Ah, no sé, pero es mejor analizar las ondas. A ver, Filósofos de Pacotilla y Faltos de Cariño, yo ye estoy a verga de tanta paja retórica, fíjense y, como no veo que la cosa vaya a cambiar, porque el Gobierno no hace ni mierda, la policía tampoco (al contrario, ayudan), creo que al menos tengo el derecho de ya no querer razonar NI MIERDA. A mí, cuando me entero de las mierdas que pasan en Mulamala, mierdas que te confirman que la vida no vale ni verga, me sobrepasa, se me hace un nudo cerote en la garganta, muchá, y ME SACO DE ONDA, pues, porque antes que cualquier mierda que pueda ser (sociólogo no, evidentemente) soy HUMANO, y es un DERECHO INHERENTE que, ante un hecho nefasto de ese tipo, o cualquiera que se le parezca, reaccione como SE ME PEGUE LA REGALADA GANA, me encabrone, insulte, maltrate, grite, llore, me encolerice, rabee, me consterne, en fin, ME INDIGNE, sobre todo cuando las desgracias incluyen niños. No sé, trato de serenarme, pero no puedo. Sus conjeturas y sus debates, oh, Arcanos del Raciocino Exclusivo, bien gracias, pero llega un momento en que, para mí, se convierten en pura cháchara, en puro berrinche, a veces, muy cercano al WHORE ATTENTION.

Porque por si fuera poco, también resulta que SI SE NOS PERMITE INDIGNARNOS, si ELLOS se apiadan y nos regalan esa bonita posibilidad, tiene que ser parejo. Sí, nuestros Próceres del Pensamiento Crítico, Colectivo y Consecuente de Guatemala DICTAN unanimidad y achacan los valores morales y éticos de quienes, ante la circunstancia de que, por ejemplo, un caco sea vapuleado luego de haberle disparado en la ñola a un chavo al que le robó el celular, y los dos se vayan a caldo, sólo PEGUEN EL GRITO EN EL CIELO por le víctima. Y no, señores, no, cómo va a ser eso. Hay que sentir IGUAL lástima por LOS DOS: víctima y victimario. Así de claro. Si no, ¡NO VALE! Y aquí yo ya me pierdo, muchá, porque no sólo nos EXIGEN reaccionar con la razón sino que además, nos piden actuar corno si fuéramos MODELOS HUMANITARIOS y/o BEATOS. Y yo, al menos, NO SOY ni una cosa ni la otra. Yo soy un puto manojo de impulsos caóticos de naturaleza flemática y pesimista, ¡no jodan! Y por lo mismo, no crean que no me dio lástima el pobre compadre vapuleado, porque se equivocan, pero dejen que YO decida por mí, dejen que me salga sentir lástima o no. ¡No me digan lo que tengo que sentir! Todos hablando del chavo del celular, ¿y la familia del caco qué?, suelen ser los comentarios que emiten constantemente nuestros Semidioses Olímpicos. Y si, yo entiendo que, SEGUN LOS ESTUDIOS, el 80% de los cacos, extorsionadores, mareros, violadores, pederastas, sicarios y criminales tuvieron una infancia difícil, crecieron en ambientes violentos y precarios, sufrieron abusos, no tuvieron la oportunidad de escolarizarse, etc , si, es una mierda y qué mal porque es el resultado de un maldito círculo vicioso, pero, ¿hasta cuándo tenemos que seguir compadeciéndonos de los trágicos pasados (y presentes) de nuestros delincuentes y asesinos? Y lo repito: ¡no justifico ni apoyo los linchamientos ni la justicia en manos de la masa! ¡Para nada! Sólo comento que, ante la dureza con la que esta gente actúa casi siempre, a mí no me nace desearle un final feliz, ¿me explico? El bote, al menos, que sería lo más adecuado. Porque yo me pregunto ¿estos cuates son TODOS realmente bestias salvajes sin una pizca de cerebro para, pese a su pasado y sus condiciones de vida, NO saber lo que está bien y lo que está mal. Acordate que son OTRAS escalas de valores, Rex, supongo que me estarán diciendo. Sí, pero aún así me cuesta creer que no sepan a qué atenerse, porque creo que nadie que haya crecido “sobreviviendo”y “malviviendo” en un ambiente marginal, como el de muchas colonias o zonas de la capital, ignore cómo es la mierda, muchá. Al contrario, lo sabe perfectamente desde güiro. No creo que ninguno de ellos ignore que así como mata también se lo pueden tronar a él. Y por si se le olvida, tampoco dudo que alguno de sus familiares se lo recuerde: Cuidate, Nery, no te dediqués a esas babosadas, mirá que te puede pasar algo, hombre. Para muchos delincuentes (esto me lo han comentado amigos que han trabajado en proyecto de reinserción social, etc.) la capital es una selva; muchos se encomiendan (si, rezan y toda la casaca) antes de salir a delinquir porque SABEN que es probable que les pueda pasar cualquier desgracia. Lo saben. Empezaron por necesidad y lo convirtieron en modus vivendi. Y están conscientes de que en la calle hay algo valioso en juego. Otra cosa es que no lo valoren como el resto, que es diferente, pero eso es parte de su visión: no tengo opciones más que ésta, que también es discutible. Me acuerdo de un documental que vi una vez sobre los reclutamientos de una banda de sicarios de México. Tres sholones tanteando a posibles nuevos miembros (gente venida del campo, muchos de ellos analfabetas, con caras de pocos amigos) y preguntándoles: —¿Tienes miedo, güey? —No, señor. —¿Sabes que te pueden mandar a a la chingada, cabrón? —Sí, señor. A eso me refiero. Todos, de alguna u otra manera, por muy IGNOTOS o imbéciles que seamos, sabemos a que nos metemos, o al menos tenemos una idea. Por eso mismo, lo que más me cuesta creer, a mí, personalmente, es que debamos ENTENDERLOS y hasta COMPADECERLOS cuando la desgracia LES PASA a ellos. No digo que no sea posible; sólo digo que me cuesta ponerme en ese plano marca Gandhi. Porque también entonces, ¿cómo se explica que haya gente criada ambientes igual de hostiles que NO ha ELEGIDO y optado por la delincuencia? Conozco muchos casos. Es más, conozco casos de gente que ha crecido rodeada de comodines, en familias “bien”, con estudios universitarios y demás, y han ELEGIDO también ser delincuentes. ¿Eso qué? ¿También nos tenemos que evocar a otros estudios, no? Me-lo-i-ma-gi-no.

El tema es largo y pantanoso, muchá, y yo no soy experto en ni verga de lo que estoy escribiendo. No justifico ni justificará nunca la violencia de ningún tipo, eso sí, que quede bien claro. Hablo aquí como un simple ser humano, como un ciudadano despojado de academicismos, teorías y estadísticas, sin obligar (sutilmente) a nadie para que lea esto, como en los muros de FB. Hablo de cosas complicadas que a lo mejor no lo son tanto porque al final de cuentas se reducen, aunque suene frío y arbitrarios, a elecciones, a lo que, voluntariamente o no, uno elige y acaba aceptando. Yo podría decirle a un caco: mano, robá, pero no matés, pero él elige lo que quiere. Es así. La suerte de los delincuentes está echada, amigos. No se hace falta que yo lo diga. Lo que pasa es que imagino que muchos de ellos, gracias a las drogas y a ese coraje interno, producto de sus vicisitudes y de su instinto de supervivencia, que los hace sentirse poderosos por el simple hecho de andar armados y regir sobre la vida de cualquier ciudadano común y corriente, evita que tengan presente que la muerte también los anda buscando a ellos. Así que por favor, cuando uno de ellos se vaya con Pancho (me pela la verga cómo), y sea noticia, no me pidan que me indigne por su muerte ni cuestiones el hecho de no enviar condolencias a sus familiares (¡habrase visto!), permítanme ELEGIR a mí cómo reaccionar y contarlo, si se me ronca el culo. Ustedes, Amantes del Saber del Saber Universal y del Devenir de la Humanidad, sigan marcando diferencias (entre LOS ILUMINADOS y el resto de la plebe) con sus especulaciones de eruditos y sus sentencias sobre lo correcto y la inaceptable, y sólo deseo que jamás nadie de su familia y amigos cercanos se vean implicados en ningún “hecho de sangre”, como dirían en Sonora, y que si esto ocurre (toco madera pese que no, y lo digo de todo corazón, créanme), sean lo suficientemente coherentes con todo lo que hoy predican, se jactan y ufanan. Si lo hicieren (estoy usando el futuro de modo subjuntivo, para que no quede duda de mi intención al expresarme), avísenme porfa, sí, para felicitarlos públicamente y admirarlos perpetuamente, porque se lo merecerían, fijo.

Con el amor que sólo una madre puede brindar,

Rex Mamey

 
Imagen tomada aquí: http://www.clarin.com/mundo/Perfecta-Cesar-Tegucigalpa-Madre-EFE_CLAIMA20120513_0170_22.jpg